Se ha hablado mucho y se hablará sobre la RC30 de Honda, así que, antes de continuar, estas son las cuatro cosas que debes saber.
Una buena RC30, con neumáticos modernos adecuados, sigue siendo una experiencia increíble. La respuesta del acelerador, la nota del motor y la dirección precisa, son increíbles para una moto de ya hace unas décadas.
Los poseedores de unidades, rara vez las utilizan, porque no hay neumáticos deportivos modernos disponibles, en las medidas de sus llantas.
La carrocería no tiene repuesto, no existe, al igual que los escapes, el manillar, la palanca y las patas de la horquilla. Los mejores neumáticos traseros disponibles en el ancho 170 de la RC, en una llanta de 18 pulgadas, son Dunlop Roadsmart 3 o Bridgestone BT54.
«Me encantaría tener una RC30», ya que la probé hace unos años y me encanto lo bien resuelta que esta toda su dinámica.
Las RC30 del mercado japonés fueron las primeras 1000 construidas. Cuando se anunció por primera vez en el verano de 1987, hubo un sorteo de elegibilidad, para comprar una. Las primeras motos tenían una placa numerada en el cuadro y una llave especial con el logotipo en una incrustación de fibra de carbono. También tenían faros pequeños como la VFR400R NC30 y estaban restringidas a 77cv como todos los modelos de 750cc en el mercado japonés.
En aquel entonces, los fabricantes producían diferentes especificaciones para diferentes países. Los franceses y los alemanes tenían una restricción de 100cv, Suiza era similar a Japón, pero el resto de Europa tenía las motos a plena potencia. En aquel entonces no nos importaba, pero a medida que crecía la demanda de la RC30, de segunda mano, se importaron cada vez más motos del extranjero.
Como motero, tuve la suerte de tener algún amigo, con una RC30, loco de las motos como yo y los detalles sobre la restricción, de algunas motos y sus mercados, las principales restricciones estaban en la unidad CDI y el silenciador, pero debido a la naturaleza de la moto, casi todos los propietarios japoneses las habrían desrestringido encubiertamente de todos modos.
Tener una RC30 es increíble, al abrir la puerta del garaje y verla allí, cada mañana es una forma increíble de comenzar el día, siendo feliz.
El motor sigue siendo asombroso. No solo por el orden de funcionamiento, tipo big bang, que genera el máximo movimiento de avance y tracción en cada pistonada. No solo por el ruido que produce su escape estándar o porque fue la primera moto de producción en montar un embrague antirrebote, sino por ser una moto de culto.
La razón principal por la que el motor es una gran experiencia, es que le permite al piloto tener el control absoluto. La relación entre el acelerador y las rpm es perfecta, lo que te permite sentir las rpm exactas que necesitas en cualquier momento que lo desees. El cambio de marchas también es perfecto y la forma en que funciona, todo su funcionamiento, es como una escena en cámara lenta de una película de acción loca, donde el héroe, esquiva sin problemas las balas y se desliza a través del peligro.
Honda mostró al mundo, exactamente lo que sabía construir, al crear la RC30.
Como moto de carretera, rápida, la RC es una moto construida sin compromisos para la carretera, simplemente para rendir. Sí, realmente era una versión de carretera de la RVF, que todo lo conquistaba. Construida para competir y ganar en las muchas series de carreras emergentes de cuatro tiempos.
La ironía fue que cuando se lanzó, nadie se dio cuenta de que el número más importante era que pesaba 25 kg menos que la competencia, lo que era mucho más importante que cuánta potencia tenía.
La calidad de pilotaje de los Öhlins que montaba, la moto que pude probar fue excelente, la sensación de pilotaje, es casi perfecta siempre.
Las RC30 tienen dos radiadores pequeños, diseñados para trabajar bien, pero desprenden tanto calor, en verano, que mis piernas parecían estar en llamas.
Cuando probé por primera vez la RC30, estaba tan emocionado, que pocas conclusiones extraje del momento, con posterioridad he probado esta maravilla e icónica moto en varias ocasiones y ahora sí que tengo una idea clara de lo que representa esta moto y lo que entrega.
Lo primero que haces cuando estas frente a la moto, es admirarla y husmearla en profundidad, ya que sus múltiples detalles y acabados, te hacen pensar en el ingente trabajo que realizaron los ingenieros de Honda, para crear, esta joya.
Poner en marcha el motor y oír su sonido, ya hace que la adrenalina llegue a su máximo nivel, calentar el motor dando acelerones cortos, te hace que estés soñando con ponerte a sus mandos y salir volando.
Por carretera, es un tiralíneas, puedes trazar las curvas, solo con el pensamiento, es ligera y se inscribe de forma magistral en las trayectorias, si tienes la oportunidad de dotarla de un amortiguador Öllins, es tan grande la mejora, que no te bajarías de su asiento. Moverte por zonas de muchas curvas, es su hábitat natural y para lo que ha sido creada, con un chasis, bastante rígido, un motor, hoy día con poca caballería, pero muy utilizable, además con su ciclo de motor de tipo Big Bang, siempre tienes par y empuje, por eso digo que es muy utilizable y aprovechable.
Con esta moto, me hice un viaje al GP de Jerez, por carretera, en esa época, autopistas y autovías, pocas, tampoco es que sea un entusiasta del uso de las autovías/pistas, para aburrirme, me quedo en casa, en ese viaje, disfrute mucho, muchísimo, ya que podíamos sacarle todo el potencial a la moto, eran otros tiempos, y, éramos jóvenes, no puedo exponer las locuras que realizamos, porque hoy son impensables.
El comportamiento, de la moto, siempre fue perfecto, buenos frenos, buen chasis, buen motor, y, unos neumáticos, que eran de la época, derrapar, no, lo siguiente, ir de lado era cuestión de poco pensarlo, porque estaba ahí. Recuerdo que la moto tenía un consumo importante de gasolina, también es cierto, que las medias eran de MotoGP y claro, hacer más de 150 km, con un depósito, era una verdadera heroicidad.
Hoy en día, es una moto, objeto de deseo y por lo tanto sus precios, son también de deseo, además que no hay muchas unidades a la venta y si buscamos una, debemos tener clara su procedencia (Japón, carreras, países europeos con restricciones en la época, etc…) pero si tenéis la pasta y queréis colmar vuestros sueños a buscar una y a babearla, lo más posible.
Honda VFR750R RC30 especificaciones
Motor: 748cc, refrigerado por líquido, 16v, V-four
Potencia: 112cv a 11000 rpm
Par: 73 Nm a 9800 rpm
Chasis: Aleación
Neumáticos: Trasero 170/60/VR18” y delantero 120/70/VR17”
Suspensión delantera: Horquilla de 43 mm, ajustable en precarga, compresión y rebote. 120 mm de recorrido – Trasera: Monoshock, ajustable en precarga, rebote y compresión 130 mm de recorrido
Frenos: Delanteros: Discos gemelos de 310 mm, pinzas de cuatro pistones – Trasero: Disco único de 220 mm, pinza de dos pistones
Distancia entre ejes: 1410mm
Altura del asiento: 785mm
Capacidad del tanque de combustible: 18 litros
Peso: 185 kg en seco
Velocidad máxima: 250 km/h
By MAYAM