La Ducati Scrambler Full Throttle 2025 es la versión más deportiva y con un «look» de «flat track» de la familia Scrambler, ofreciendo una experiencia de pilotaje distintiva que combina el estilo, la diversión y la tecnología. Es un modelo que, sin ser una superdeportiva, brinda sensaciones emocionantes y un comportamiento dinámico ágil, ideal para quienes buscan una moto con carácter y estilo propio.

Diseño y estética
La Full Throttle se distingue de sus hermanas por una estética más agresiva y enfocada al mundo de las carreras «flat track». Su diseño es minimalista y «desnudo», siguiendo la filosofía de la «Land of Joy» de Ducati.
Aspecto: Combina el color negro con detalles en bronce, incluyendo las llantas, lo que le da un toque distintivo y elegante. Las placas laterales con el número «62» (en referencia al año de lanzamiento de la primera Scrambler) refuerzan su herencia deportiva.

Componentes: El manillar bajo y de sección variable, el guardabarros delantero corto y el colín sin guardabarros trasero de serie le otorgan una silueta más aerodinámica y compacta. El escape Termignoni, que viene de serie, no solo mejora el rendimiento, sino que también contribuye a su sonido característico.
Acabados: La calidad de construcción es alta, con una atención al detalle en la pintura y los componentes, lo que se espera de una marca premium como Ducati.

Como es, sensaciones generales y experiencia de pilotaje
La Ducati Scrambler Full Throttle es una moto ligera y fácil de manejar. A pesar de su enfoque deportivo, su principal atractivo es la diversión. La experiencia de pilotaje es directa y sincera, sin filtros. El sonido del motor bicilíndrico Desmodue es una parte fundamental de la experiencia, con su característico latido. Es una moto que atrae miradas y genera conversación, ideal para el día a día. Sin embargo, su asiento, aunque más plano y de estilo deportivo, puede resultar duro en viajes largos.

Comportamiento en ciudad y viajes
En Ciudad: Es su hábitat natural. Su bajo peso (185 kg en orden de marcha), su manillar ancho y su agilidad la hacen perfecta para moverse en el tráfico. La respuesta del motor es suave y lineal a bajas revoluciones, lo que facilita el pilotaje en las calles congestionadas. Además, su altura de asiento de 795 mm la hace accesible para la mayoría de los pilotos. El quickshifter de serie es una gran ventaja para el uso urbano.
En Viajes: Aunque es posible viajar con ella, no es su punto fuerte. El depósito de 13,5 litros limita la autonomía, y la ausencia de protección aerodinámica puede ser incómoda a altas velocidades. El asiento duro también puede ser un factor de fatiga. Para viajes cortos o rutas de un día, es perfectamente capaz, pero para grandes travesías se siente limitada.


Comportamiento dinámico a ritmo qlto en carretera
La Full Throttle se comporta de manera excelente en carreteras con curvas. La combinación de su chasis, sus suspensiones ajustables (al menos en el monoamortiguador trasero) y sus neumáticos Pirelli MT 60 RS le brindan una agilidad y precisión notables.
Aceleración: El motor de 73 cv tiene suficiente potencia para una aceleración contundente y para divertirse en tramos revirados. El sistema «ride-by-wire» permite una respuesta del acelerador instantánea.
Frenada: Los frenos, con pinzas radiales de 4 pistones y disco de 330 mm, son potentes y ofrecen un excelente tacto. El sistema ABS en curva de Bosch, de serie, proporciona un extra de seguridad.
Estabilidad: A ritmos muy altos o en autopista, se puede sentir cierto «bamboleo» en la dirección y la falta de aplomo que tendría una moto con una orientación puramente deportiva, especialmente para pilotos de gran estatura. No está diseñada para un uso extremo en circuito, pero en carretera abierta su rendimiento es más que suficiente y divertido.

Comportamiento en campo
A pesar de su nombre y su inspiración «flat track», la Scrambler Full Throttle no es una moto para el off-road. Su equipamiento y su geometría están pensados para el asfalto. Si bien puede manejar caminos de tierra y pistas sencillas sin problema, sus suspensiones con 150 mm de recorrido y sus neumáticos con un dibujo más «callejero» no están optimizados para terrenos complicados. Es más, un concepto de estilo que una verdadera moto de aventura. Para un uso off-road real, el modelo Desert Sled de Ducati sería una mejor opción.

COMENTARIO
La Ducati Scrambler Full Throttle 2025 es una moto de nicho, pero muy bien ejecutada. Ducati ha logrado mantener la esencia lúdica y minimalista de la Scrambler original, mientras le inyecta una dosis de tecnología y componentes de alta calidad que la hacen más segura y atractiva. Es una moto que se compra con el corazón tanto como con la razón.
Su principal fortaleza es la experiencia de pilotaje. Es una moto que no intimida, pero que tiene el suficiente carácter para entretener a pilotos de todos los niveles. La entrega de potencia del motor bicilíndrico es ideal: no es un cohete, pero tiene un «punch» agradable y una capacidad de recuperación que la hace muy divertida en carreteras de montaña. El quickshifter es una adición fantástica y que eleva la sensación de deportividad.

Sin embargo, hay que tener en cuenta sus limitaciones. Para quienes busquen una moto para viajar, su autonomía y comodidad son mejorables. Y para los que piensen que su nombre de «scrambler» la hace apta para un off-road exigente, se llevarán una decepción. Es una «scrambler de asfalto», pensada para la jungla urbana y las carreteras reviradas, con un estilo inconfundible.
En definitiva, es una máquina de estilo y sensaciones, un producto premium que ofrece una experiencia de pilotaje única y personalizable, ideal para el motociclista que valora la estética y la diversión por encima de las prestaciones brutas.

ESPECIFICACIONES
Motor Bicilíndrico en L, Desmodue, 803 cc, refrigeración por aire.
Potencia máxima 73 cv (53,6 kW) a 8250 rpm.
Par máximo 65,2 Nm a 7000 rpm.
Transmisión 6 velocidades, embrague hidráulico antirrebote.
Cambio Quickshifter bidireccional (de serie).
Chasis Tubular de acero.
Suspensión delantera Horquilla invertida Kayaba de 41 mm (no ajustable).
Suspensión trasera Monoamortiguador Kayaba (ajustable en precarga).
Recorrido de suspensión 150 mm (delante y detrás).
Freno delantero Disco de 330 mm con pinza radial Brembo de 4 pistones.
Freno trasero Disco de 245 mm con pinza de 1 pistón.
Electrónica ABS y Control de Tracción en curva, 2 modos de motor (Road y Sport).
Peso en orden de marcha 185 kg (en seco 170 kg).
Altura del asiento 795 mm (ajustable con asientos opcionales).
Capacidad del depósito 13,5 litros.
Neumáticos Pirelli MT 60 RS, 110/80 R18 (delante) y 180/55 R17 (detrás).
Panel de Instrumentos Pantalla TFT a color de 4,3 pulgadas.
By MAYAM