Aquí se podría decir aquello de “aquellos locos y sus locos cacharros” porque esta moto Ossa Byra 1000, fue un modelo prototipo que se usó en algunas carreras en cuesta, pero ciertamente no fue una moto popular, como lo entendemos hoy.
La Byra era una pluricilíndrica, que, aunque fue fabricada por Ossa, no fue creada por la marca, esa moto la pude ver en su desarrollo en la pista de pruebas que tenia la marca en Barcelona, me pase muchas horas viendo evolucionar los modelos de Ossa, pues yo vivía en la parte trasera de la fábrica y desde la terraza podía ver la factoría y sus pruebas.
La moto fue creada por la familia Batlló, que estaba muy ligada a los deportes de motor, sobre todo el padre de familia (Fernando Batlló), con el tiempo y junto a la familia Giró, que también eran amantes de los motores y además esta familia fueron los propietarios de la marca Ossa.
El primer prototipo que crearon loa Batllo/Giro fue uno llamado Batlló 500 (o Byra 500). Esta moto se desarrolló con la unión de dos motores de Ossa 250 Sport con una cilindrada unitaria de cada uno de ellos de 243,7 cc, el resultado fue un motor Twin paralelo de dos tiempos, la refrigeración por aire (lo usual de la época), ese motor entregaba una potencia de 50 cv, el chasis donde se ubicaba el motor era del modelo original.
Se marco el objetivo de ganar las 24 horas de Montjuic y se inició el trabajo de un nuevo prototipo, la nueva moto utilizaría como base el motor del modelo americano Yankee 500, fabricado en las instalaciones de Ossa (ahora en la Zona Franca de Barcelona). La Yankee utilizaba un propulsor bicilíndrico de 480 cc y 58 cv.
La idea de los Batlló de unir ambos bloques dio como resultado un poderoso tetracilíndrico de dos tiempos y refrigeración por aire, para conseguir un resultado optimo se tuvieron que realizar muchas adaptaciones y pruebas en las que el trabajo ingenioso y las ganas hicieron que funcionase.
Temas como el acople de los dos cigüeñales, se realizó mediante una estructura de piñones que los dejaba calados a 180º, es decir, los dos cilindros exteriores por un lado, y los dos cilindros interiores por otro, dicho de otra manera, si los dos exteriores subían al mismo tiempo, los dos interiores bajaban, y viceversa, ese era el ciclo de 180º.
Para dar de beber al prototipo se utilizaban cuatro carburadores que fueron aumentando el diámetro del difusor, haciendo que la potencia fuese aumentada de los 80 cv hasta los 118 cv en su versión final, una potencia que muy pocas motos conseguían en esa época.
La parte ciclo provenía de los modelos Yankee 500 Z, estos modelos estaban enfocados al uso offroad tipo dirt track y raids en modalidad de cross country.
Para conseguir que las suspensiones funcionasen bien, se tuvo que trabajar mucho tiempo y realizar muchas pruebas y también se reforzó el chasis, porque era muy frágil para la potencia del modelo.
Dado que era un motor 2T y que estos son muy glotones, la moto tenía un gran deposito, la moto tenía un consumo superior a 20 litros cada 100 kilómetros.
La creación de este motor levanto mucha expectación, pero los éxitos en competición no llegaron. En la primera carrera de 1972 en las 24 horas de Montjuic, la Byra 1000 se estrellaba al final de recta, quedando totalmente destrozada.
En 1973, volvieron a intentarlo con una moto más evolucionada y potente que la anterior, quedaron fuera de carrera por numerosos problemas mecánicos y dando por terminado el sueño de la 1000 tetracilíndrica dos tiempos de fabricación española, una moto difícil de gobernar debido a una entrega de potencia explosiva y una parte ciclo que no se encontraba a la altura de tanta potencia.
Después de los pobres resultados obtenidos por la Byra 1000 se desechó el proyecto, pero los Batlló utilizaron la experiencia adquirida para dar vida a una nueva creación, menos pasional y más civilizada, unieron tres motores de 175 cc, y crearon la Byra 525 tricilíndrica.
By MAYAM