Existe una reticencia comprensible entre un segmento sustancial del mercado occidental de motociclismo para adoptar motos fabricadas en China, pero la industria parece estar experimentando una revolución en términos de tecnología, estilo y calidad. Es suficiente para dar crédito a las antiguas profecías de que las motos chinas seguirán los pasos de las máquinas japonesas en el escenario internacional.
La reciente feria CIMA en China subrayó ese punto, ya que proporcionó una plataforma para una serie de nuevos lanzamientos de marcas desconocidas en esta parte del mundo, todas ellas desafiando las ideas preconcebidas de que las empresas chinas solo pueden fabricar productos baratos, de baja capacidad y bajo costo y con poca calidad. Entre las estrellas del espectáculo se encontraba una moto conceptual de Jinan Jedi, una empresa cuyo enfoque anterior era suministrar moto a la policía y los servicios de seguridad chinos, pero que se está moviendo hacia el mercado de consumo.
Una moto concept
El concepto Vision K750 de la marca no se vería fuera de lugar en una presentación de marca japonesa o europea, y aunque es un concepto de moto en lugar de un modelo de producción, claramente está muy cerca de salir de una línea de ensamblaje. Debajo de esa apariencia impresionante, se entiende que usa el mismo motor bicilíndrico en paralelo de 730 cc de los dos nuevos modelos de producción de la compañía, la GTR750 sport-tourer y la roadster desnuda JFR750.
El motor
Eso significa que, a pesar de su apariencia radical de estilo superbike, la K750 es en realidad una máquina de tamaño mediano. En su forma de producción, ese gemelo paralelo DOHC de fabricación propia designa dos cilindros y un diámetro de 83 mm, y dado que la cilindrada conocida es de 730,4 cc, podemos deducir que la carrera es de 67,5 mm. Su rendimiento conocido está más o menos en línea con las expectativas de un motor de bajo costo con esas especificaciones, con una potencia máxima de 68 cv a 7500 rpm y un par máximo de 67 Nm a 6500 rpm.
En los modelos de producción mencionados anteriormente, ese motor se asienta en un chasis de aluminio fundido que supuestamente fue diseñado por Suter en Suiza, lo que es un buen augurio para su potencial. El concepto K750 también parece tener un diseño similar y usa la misma horquilla invertida y los mismos frenos Brembo que tienen la GTR750 y la JFR750, por lo que claramente no es una máquina completamente imaginaria.
Donde el concepto comienza a extenderse hacia el territorio de las motos de exhibición es con detalles como el faro, compuesto por 76 fragmentos triangulares, iluminado por LED y flanqueado por luces de marcha en forma de boomerang. Las luces traseras usan el mismo diseño, con múltiples elementos triangulares metidos en cubiertas en la unidad del asiento.
By MAYAM