Con la llegada de la primavera, muchos son los que salen con sus motos tras un largo periodo de inactividad después del frío invierno y volver a disfrutar de las ventajas de las motos con una mejor climatología y temperatura.
Hoy hablare de una serie de acciones que debemos practicar antes de volver a rodar con nuestra moto con todas las garantías, no basta con quitar un poco el polvo del asiento y empezar a movernos, pues es muy recomendable o mejor dicho, obligatorio, seguir una serie de pasos mínimos para poner a punto la moto y que su funcionamiento sea el más adecuado y el más seguro.
Debes tener una serie de detalles bien operativos, para disfrutar:
Batería
Los moteros más apasionados o no, no dejan de utilizar sus motos durante todo el año, haga frio, calor, lluvia, etc… pero algunos hibernan su moto, si decidimos que la moto no se moverá durante la época de frio, lo primero que debemos hacer, es desconectar la batería o sacarla de la moto y guardarla en casa en un lugar oscuro y seco. Pero, la mayoría no realizan ese movimiento, por lo que, al volver a intentar poner la moto en marcha tras unos meses parada, lo más normal es que este descargada o agotada, pensemos que las motos modernas portan sistemas electrónicos que siempre necesitan energía para seguir activos, por lo que la batería esta siempre en modo descarga, ante lo cual cuando vayamos a ponerla en marcha no arrancará, para solucionar ese inconveniente, podemos comprar un arrancador de batería, que son baratos y efectivos y podremos salir del apuro de que no arranque, pero, si la batería ya tiene unos años, se descargará y se agotará, por lo que aunque apliquemos el arrancador, no se pondrá en marcha y deberemos cambiar la batería, que no son baratas.
Si no es el caso, intenta arrancar. Si ha pasado poco tiempo, seguramente la batería será capaz de dar corriente al sistema para hacer funcionar el motor. Si no, tendrás que buscar otro método, como arrancarla “a capón”, es decir, cogiendo la mayor velocidad posible en punto muerto y meter una marcha larga (segunda o tercera) mientras sueltas la maneta del embrague, de manera que el giro de la rueda obligue a moverse el motor y así provocar la explosión y el arranque del motor. Ya sabrás que, si esto te ocurre en un scooter, no podrás hacer este arranque manual, pero también hay motos que tienen un alto par y aunque intentes ese truco, no se pondrá en marcha.
Una vez instalada la batería en el compartimento correspondiente de la moto o el scooter, podemos untar un poco de vaselina a los bornes de la batería para proteger los componentes de contacto de posibles oxidaciones y sulfatación. Recuerda que la conexión de la batería debe hacerse en orden, conectando primero el polo positivo y luego el negativo.
Líquidos y sus niveles
La moto, como sabéis, tiene una serie de depósitos para portar diferentes líquidos, refrigerante, frenos, etc… y todos tienen un nivel máximo y mínimo, y que, después de varios meses parada, se deben revisar.
Aspecto básico para comprobar es el nivel de aceite del motor, debemos comprobar que está entre las guías correspondientes de la varilla, o el ojo de buey, pero debe estar entre las dos rayas o marcas, la comprobación la debes hacer con la moto subida al caballete central o con la moto en la posición más recta, si lleva pata de cabra deberás colocarla lo más vertical posible y sujetarla unos minutos para que el aceite marque su nivel.
Un detalle importante en el mantenimiento de la moto es llevar todos los datos apuntados, por ejemplo: cambio de aceite, la fecha y los km que marca y cuando será la próxima vez para cambiar, si llevamos la cuenta de kilometraje, sabemos cuándo le toca el cambio de aceite. De lo contrario, es recomendable hacer la sustitución lo antes posible o tener en cuenta este cambio de aceite una vez al año o una vez alcanzado el kilometraje estipulado por el fabricante. No debemos ser rácanos con los cambios de aceite, poner uno de calidad y multigrado a poder ser sintético y controlar su nivel al menos cada 15 días.
Tenemos que echar un vistazo a los niveles del líquido de frenos, ya que es el responsable de transmitir la fuerza ejercida en la maneta y el pedal hasta los pistones de las pinzas que abrazan los discos. Si vemos que el nivel no está entre los puntos máximo y mínimo, debemos sustituirlo. El mal estado del líquido también puede ser debido a la presencia de aire dentro del circuito, lo que repercute en un tacto demasiado esponjoso y con pérdida de eficacia. En cualquier caso, no deberíamos tardar más de 2 o 3 años en sustituirlo. También las motos que llevan liquido de embrague debe ser sustituido con la frecuencia descrita
Otro líquido importante para el buen funcionamiento de la moto es el anticongelante. Este nivel lo podemos ver en el vaso de expansión, también con sus puntos máximo y mínimo. Si no llega al mínimo, lo debemos rellenar, eso sí, nunca con agua. Este líquido refrigerante lo deberíamos cambiar cada 2 o 3 años.
Conductos de goma (manguitos)
La moto está llena de conductos y manguitos de goma, sobre todo para los diferentes circuitos de líquidos, los cuales también se pueden ver afectados con el paso del tiempo o incluso perforar o romper, debemos comprobar su estado, que no presenten grietas o escapes.
Filtro del aire y aceite
Durante este tiempo, el filtro de aire habrá acumulado cierta suciedad. Nunca está de más hacer una limpieza de este componente para que el motor respire mejor o sustituirlo, el mismo caso para el filtro de aceite, si la moto lo monta.
Engrase de cadena de transmisión y otra lubricación
Existen líquidos de limpieza de la cadena, proceso en el que podrás ayudarte de un paño o incluso un cepillo de dientes viejo. Luego, rociaremos la cadena con aceite o grasa de cadena. También hay que revisar la tensión de la cadena, que debería variar en una holgura especificada por el fabricante en el manual de usuario. La forma de hacerlo también vendrá indicada y tendrás que seguir las instrucciones del modo de tensado específico de tu moto.
Aparte de la cadena, el fabricante recomienda revisar otros componentes que conviene tener bien lubricados mediante un espray que aplicarás, por ejemplo, en manetas, caballetes, etc…
Neumáticos
Los dos neumáticos de la moto son elementos claves en el funcionamiento en cualquier momento y, con más motivos aún, debes echarles un vistazo después de un largo periodo de inactividad. Lo primero es revisar la presión y comprobar que está en los parámetros recomendados por la marca, algo que también debes realizar a menudo (cada 15 días).
Sin embargo, el neumático también se ha podido ver afectado mientras hibernaba, sobre todo si ha estado a la intemperie recibiendo la luz del sol, agua y cambios de temperatura. Por tanto, debemos ver más de cerca el estado del compuesto, ya que la goma puede cuartearse. Las grietas nos dicen que el neumático no está en sus mejores condiciones, pudiendo así perder presión de manera repentina o perder agarre de manera notable o incluso reventar, con las consecuencias que acarrea, por lo que deberíamos buscar neumáticos nuevos lo antes posible.
Limpieza
No está de más hacer una limpieza general de la moto o el scooter. Obviamente, haber estado guardada en el garaje e incluso tapada con una funda, le habrá ayudado a estar más protegida.
La carrocería, los faros o la tapicería del asiento son los elementos básicos de tu limpieza, ya no sólo por una cuestión estética sino por mantenerla en buen estado. También debes tener especial atención a los bajos o a las llantas, donde más aceite y suciedad se puede acumular.
Suspensiones
Debemos echar un vistazo a los tubos de la horquilla y comprobar que no haya “sudado” aceite. Esto puede ser debido al deterioro de los retenes de goma, que impiden que el aceite se salga. Lo mejor es acudir a un taller para que instalen nuevos retenes o, de lo contrario, la suspensión irá perdiendo aceite paulatinamente y la horquilla perderá eficacia.
Gasolina
Seguramente, habrás dejado la moto o el scooter con algo de gasolina en su depósito. Sobre la caducidad de la gasolina, no hay nada confirmado. Las compañías petroleras trabajan con diferentes aditivos para evitar que sus combustibles dejen posos o residuos, pero es algo inevitable con el paso del tiempo.
Hay expertos que declaran que sus propiedades completas pueden empezar a perderse pasados tres meses o durar tranquilamente hasta un año… Si queremos ser impolutos con nuestro cuidado, podríamos retirar la gasolina para llenar el depósito con gasolina nueva y las motos que llevan filtro de gasolina, deberá ser sustituido.
Primeros kilómetros…
Una vez revisados todos estos elementos, arranca la moto. Deja que se caliente al ralentí durante unos minutos y emprende tu recorrido con calma para comprobar que esos elementos revisados funcionan bien. También es el momento de comprobar que funcionan todas las luces (diurnas (DRL) si las tiene, posición, cortas, largas, de freno e intermitentes).
Si hemos realizado todas esas revisiones, lubricado y limpiado todos los elementos mencionados, comprobaremos que la moto tiene un funcionamiento suave y que todo funciona a la perfección.
Siempre debemos ser exigentes con el mantenimiento de nuestra moto, básicamente por nuestra seguridad física, si la moto está en perfecto estado nos dará muchas satisfacciones, caso contrario, muchos males de cabeza, aparte que con la seguridad nunca debemos jugar.
Ahora sí, disfruta de tu moto en primavera… y el resto del año.
By MAYAM