Construida alrededor de una Yamaha SR500, la «Alternativa Motorrad Konzept» todavía se presenta hoy como una moto monoplaza inusual, totalmente carenada, con un gran faro en la carrocería.
Dos o cuatro ruedas no importa: cuando las mentes de los diseñadores de una marca están alborotadas, a menudo se presta poca atención a la tradición de esa misma Casa y se cruza peligrosamente hacia campos pequeños explorados.
Este fue el caso de Lamborghini, quien en 1986 presentó en Design 90, una moto basada en la Kawasaki 1000 a la cual elogió la ardua tarea de encarnar el espíritu de Santa Ágata sobre dos ruedas y Porsche, que en 1980 presentó al público la AMK Extravagante(Alternative Motorrad Konzept).
Y es precisamente en esto último en lo que queremos centrarnos, porque, después de 40 años, la extraña moto concebida por el Porsche Design Studio todavía parece futurista, tanto que todavía despierta un poco de asombro.
DISEÑO FUTURISTA Y CASCO ENVOLVENTE
Todos los modelos de Porsche desarrollados: en el Weissach Development Center, un centro de desarrollo que comenzó a funcionar en 1971 y de donde también se desarrolló cuidadamente la AMK. Construida alrededor de la Yamaha SR500 monocilíndrica, la Porsche AMK todavía se presenta hoy, en su único ejemplar realizado, como una moto monoplaza inusual, toda carenada, incluyendo las ruedas, con un gran faro integrado en la carrocería, al parabrisas se incorporaron los intermitentes y un diseño tan futurista que hoy, en 2021, todavía parece adelantado a su tiempo.
CELEBRADA EN EL MUSEO PORSCHE
Además de su diseño futurista, la AMK de Porsche debajo de la carrocería presenta detalles técnicos que estaban destinados a que fuese fácil de pilotar. De hecho, junto con un estilo minimalista, la moto alemana viene con una caja de cambios automática sin embrague, variador CVT, transmisión final por eje y suspensión trasera tipo cantilever.
Detalles que ciertamente no dejaron huella en cuanto a prestaciones, tanto que hasta la fecha pocos la recuerdan, aunque en Alemania todavía si miras en el interior del Museo Porsche, aparece este ejercicio de estilo y no deja de ser una moto anecdótica.
By MAYAM