Nacida en 2018, la KTM 790 Duke subió a 890 en 2021 alcanzando los 115 caballos de potencia, este año, la nueva 890 Duke R recibió los colores de MotoGP con la potencia a 121 caballos. Lo que, combinado con un peso de solo 166 kg declarado seco, la convierte en una naked decididamente deportiva.
La evolución, por supuesto, no se detiene y ya el verano pasado se vio en las pruebas de carretera el prototipo de una nueva versión con un motor diferente y con otras innovaciones en el chasis.
El bicilíndrico en línea LC8c se mostró con paredes de aluminio y con un diseño diferente que insinuaba un aumento en la cilindrada. Hipótesis que se ha fortalecido con avistamientos posteriores que también han mostrado cambios en el estilo de la hyper desnuda.
Las últimas fotos espía confirman que KTM está preparando una nueva versión de Duke en línea con la próxima regulación de emisiones Euro5b (también llamada Euro5+) que estará vigente a partir de 2024.
Una legislación más estricta, entre otras cosas, sobre las emisiones de ruido, por lo que si desean mantener un alto rendimiento, o tal vez aumentar, el camino a seguir es, por supuesto, aumentar la cilindrada.
El motor montado en estos prototipos que llegó a la fase de pruebas en carretera es una evolución del LC8c, como se puede ver en el diseño diferente de la unidad térmica: los cilindros y la culata también tienen diferentes dimensiones y la nueva cubierta de distribución también podría ocultar el control de sincronización variable.
Un expediente técnico que se ha convertido en fundamental precisamente en términos de rendimiento y regulación. La hipótesis de que puede ser una cilindrada mayor, tal vez cerca de 990 cc ya utilizado en el pasado en el V-twin, puede no ser tan descabellada.
El sistema de escape es nuevo y ve el silenciador agotarse: por esta razón, el diseño del basculante ha cambiado y se ha vuelto asimétrico y con el brazo derecho curvado para dejar espacio para el escape.
Pero también el lado izquierdo (cadena) muestra un patrón diferente en las costillas de refuerzo. Esta KTM también cambia el subchasis trasero, los dos sillines, la cola y el porta matriculas con sus luces traseras.
El sistema de frenos ve pinzas con logotipos KTM y discos de 300 mm (como en la actual 890 Duke), mientras que anteriormente se había visto un ejemplar que montaba pinzas Brembo monobloque con discos de 320 mm: en resumen, podría ser una configuración diferente. Las suspensiones de WP se verían iguales.
La estética se renueva a su vez. El tanque está enriquecido por lados más elaborados y extendidos que también cubren el radiador, hay un nuevo guardabarros delantero y sobre todo aparece una nueva luz con dos luces superpuestas que recuerda un poco a las soluciones recientemente adoptadas por Yamaha y Suzuki para sus series desnudas MT y GSX-S.
Hay una buena posibilidad de ver a la nueva Duque en 2023.
By MAYAM