La Suzuki GSX-R1000 lleva un tiempo algo desatendida por parte de la marca japonesa, pero desde Kardesign han elaborado un posible de última tecnología que Suzuki podría sacar de aquí a unos años para rivalizar con las superbikes actuales.
A continuación te mostramos unos interesantes montajes que podrían dictaminar la línea estética de la próxima GSX-R.
Suzuki es la última por renovar su punta de lanza del segmento más deportivo, la Suzuki GSX-R1000. Suzuki lleva centrando todos sus esfuerzos en MotoGP desde hace 5 años, habiendo dejado huérfana su presencia de manera oficial en el Campeonato del Mundo de Superbikes. Esto ha relegado a la famosa Gixxer 1000 a una posición menos aventajada que el de su competencia, a pesar de toda la tecnología que aplicaron sobre la GSX-R1000 2017, con IMU de 6 ejes, ciclo de última actualización y sistemas de distribución variable.
El resto de marcas ya han actualizado sus Superbikes, generalmente presionadas por la entrada en vigor de una nueva normativa anticontaminante Euro5. Suzuki es la última junto Kawasaki en actualizar sus deportivas de 1000 centímetros cúbicos a raíz de esta nueva normativa, ya que no solo suelen ajustar sus emisiones, sino que suele haber un cambio generacional en el diseño de las mismas, abriendo veda a una nueva generación.
Por otro lado, la marca de Hammamatsu también abandonó la interesante senda de las supersport y las antiguas Superbikes, la GSX-R 750, una moto muy equilibrada, interesante, potente y dócil al mismo tiempo, pero que navegaba a la deriva en un mercado sin nicho. Con solo la 1000 como foco de esfuerzos y escaparate «racing», y junto a los importantes progresos realizados por la marca en el Campeonato del Mundo de MotoGP, y la creciente competencia de marcas en WSBK, podemos suponer que la marca japonesa Suzuki podría despertar un nuevo modelo más actualizado, y con mayor similitud a su prototipo de MotoGP para dentro de unos años.
By MAYAM
